EDICIÓN 91 | 2021

Vesna Marinkovic U.

Canedo habló con ENERGÍABolivia sobre los mercados de gas boliviano. En relación a Brasil dijo que este país expandirá su consumo de gas natural e incrementará su producción nacional en el Pre-Sal, pero, remarcó que la misma sigue siendo costosa; mientras considera que Argentina mantendrá una relación comercial intermitente con el país.

1A manera de contexto, ¿cuál su lectura sobre el mercado del gas en América del Sur, inmediatamente antes y durante esta extraña pandemia?

En 2019 la demanda mundial de petróleo era de 101 millones de barriles diarios y en 2020 fue de 92.1 millones de barriles por día, cantidad que disminuyó como consecuencia de la pandemia. El resultado ha sido que los precios internacionales del petróleo han caído, y las inversiones se han postergado.

2Algunos analistas dicen que esta pandemia está significando la debacle de los combustibles fósiles, ¿estaría de acuerdo con esta apreciación?

La pandemia es un evento transitorio cuyo efecto se disipará en el tiempo, existe otro fenómeno cuyas consecuencias son estructurales. La economía mundial ha ingresado en una transición energética, misma que es causada por tres causas; la incorporación de los coches eléctricos, la introducción de tecnologías más eficientes para generar electricidad a partir de combustibles fósiles, y la mejora de las energías alternativas.

Los coches eléctricos serán adoptados por el mercado de manera lenta en un principio para luego acelerar su adopción, este proceso de incorporación de los vehículos eléctricos es conocido como la curva “S” inclinada, que es la trayectoria que sigue una nueva tecnología para ser adoptada.

En cambio, la demanda de petroquímicos aumentará, gracias al ingreso a la clase media de millones de personas en el Asia. El consumo del petróleo seguirá creciendo, pero ya no para hacer combustibles, más bien para hacer petroquímicos.

3¿Considera que la pandemia ha agudizado la crisis de este sector en Bolivia?

Hay un efecto mixto, el subsidio a los carburantes importados disminuyó, gracias a menores precios internacionales y menor demanda interna y externa de combustibles. Esto implica que las reservas actuales duraran un poco más y da tiempo para realizar nuevos descubrimientos. Pero, los ingresos del sector bajaron.

“…nuestra legislación petrolera y el análisis de la opinión publica siguen en 1999, la realidad cambio, existe otra estructura de mercado”

 

4A finales de diciembre de 2020 Bolivia suscribió con la estatal petrolera de Argentina (IEASA) la de nominada Quinta Adenda al Contrato de Compra-Venta de Gas Natural, ¿qué elementos nuevos introduce esta adenda que sean favorables o desfavorables para Bolivia?

Argentina puede producir gas natural, pero su demanda cambia a lo largo del año, en invierno necesitan más gas por el invierno austral, es en ese momento cuando importan gas para cubrir su mercado; en verano, en cambio, son exportadores. La situación es la siguiente, necesitan menos gas en total, pero cuando necesitan les urge, el resultado es que les vendemos menos gas, pero a precios más elevados.

5En la Quinta Adenda estamos ha blando de una reducción en la venta de volúmenes de gas: en los meses de alta demanda (junio-agosto) el volumen se reduce de 18 MMmcd a 14MMmcd; y, para los meses mayo y septiembre, el volumen demandado se reduce de 16MMmcd a 13 MMmcd, ¿cómo observa este acuerdo?

Dadas las condiciones actuales del mercado, es un buen acuerdo. El problema es que nuestra legislación petrolera y el análisis de la opinión pública siguen en 1999, la realidad cambio, existe otra estructura de mercado. Existe la transición energética, mencionada arriba. El paradigma de formación de precios del gas natural también cambió, la legislación boliviana aún calcula el precio del gas natural de exportación como un promedio de combustibles del petróleo, pero los contratos de gas natural en el mundo, en especial GNL, se calculan con una dinámica propia, independiente del petróleo, a esto se le conoce como el divorcio entre el gas y el petróleo.

6Dicho esto, ¿cómo calificaría la situación de Bolivia frente a sus dos mercados más importantes para el gas natural?

Brasil expandirá su consumo de gas natural, es una política nacional, incrementará su producción nacional en el pre sal, pero la misma es costosa, construyen más plantas de regasificación de GNL en la costa, sin embargo, llevar ese gas al interior de su territorio también es costoso, así que seguirán necesitando de Bolivia.

 

La Argentina, tiene importantes inversiones en Vaca Muerta y otras reservas de gas no convencional, pero sus campos convencionales están en declive, como ser Loma La Plata. Entonces el ascenso de la explotación no convencional debe cubrir primero el descenso de la convencional, y si existen excedentes, buscarán exportar, el problema de los pozos no convencionales es que tienen una vida útil de solo 3 años, frente a 20 años de los convencionales, así que permanentemente deben explorar y desarrollar reservas. Así que la Argentina será un rival en verano, y un cliente en invierno

“La situación es la siguiente, necesitan menos gas en total, pero cuando necesitan les urge”

Facebook
Twitter
LinkedIn
Energía Bolivia

FREE
VIEW